Asociación Civil Bolivariana "Defensores del bolívar"

domingo, noviembre 18, 2007

Política Cambiaria: Control de Cambio y devaluación

Por Manuel Varela
Fecha de publicación: 16/03/05

En mi breve escrito anterior sobre la devaluación trate de llamar la atención a la necesidad de recurrir a la rigurosidad teórica y al Marxismo Dialéctico como método de análisis con el fin de disponer de una plataforma ideológica y un universo de discurso común que nos permita compartir la crítica y sus conclusiones. Hasta el propio Hugo Chavez lo repite con frecuencia: "sin teoría revolucionaria no puede haber revolución".
No podemos entender el fenómeno social y político sin conocer los distintos intereses de clase presentes y los conflictos generados por esas clases o sectores de poder dentro de la sociedad.
Existe un famoso axioma que define la Economía como la ciencia que resuelve el conflicto entre la existencia limitada de recursos y el deseo o demanda ilimitada por los mismos. A esto debemos agregar otro principio de aceptación universal: "no podemos beneficiar a un sector sin perjudicar a otro"
La pugna por los recursos y por el producto del trabajo entre las diferentes clases sociales es lo que Marx llamo "Lucha de Clases" y representa el factor motriz de la Historia desde que las tribus indígenas iniciaron sus guerras por la posesión de las tierras en la era previa a la Civilización. Desde entonces hemos transitado por las confrontaciones entre señores vs. esclavos, patricios vs. plebeyos, burguesía vs. nobleza feudal, burguesía vs. proletariado, burguesías nacionales de distintos países entre si, burguesías imperialistas vs. oligarquías coloniales y la era actual marcada por la pretensión del Imperio de dominar y controlar todo el Planeta.
La única forma de la cual disponemos para evaluar el carácter progresista, revolucionario o reaccionario de un régimen es evaluar la forma como distribuye los recursos y/o beneficios entre los sectores en pugna. Los que reciben mas a expensas de los que realmente pagan la factura. Si analizamos las políticas cambiarias y fiscales conjuntamente con la situación actual de PDVSA, vemos que la RB de Hugo Chavez no califica ni siquiera como progresista.
La devaluación de la moneda en todas sus formas y facetas, maxidevaluaciones con hiperinflaciones, mini devaluaciones sucesivas o "Crawling Peg" o cualquier invento parecido representan el mecanismo mediante el cual el Estado transfiere recursos o riqueza de toda la sociedad a la Clase Dominante. Dichas devaluaciones han sido la raíz del empobrecimiento dramático de los pueblos de África y de América Latina en los últimos 30 años y del enorme diferencial entre ricos y pobres que caracteriza a ambos continentes.
La devaluación es en general un medio para expropiar a la sociedad, particularmente a quienes efectúan el trabajo productivo. En el caso Venezolano el sector productivo es escaso por cuanto se trata de una economía rentista alimentada por la factura petrolera. Por lo tanto, las clases dominantes buscan la distribución de esa renta petrolera mediante otro mecanismo todavía mas pernicioso que la devaluación: el Control de Cambio!!
Incluyo a continuación un extracto de un trabajo mas amplio que escribí hace mas de un año para denunciar y revelar la hipocresía de los economistas del status quo (IESA y compañía) a la hora de cuestionar el CC y aportar un analisis mas objetivo a la opinión publica.
"........ Una vez saqueadas las reservas del Banco Central y colocado el País en una situación de insolvencia internacional con un inaceptable nivel de endeudamiento, LHC decreta el famoso Control de Cambio que aparece por primera vez en 1983, después del llamado "Viernes Negro". Con esto se produce la primera devaluación del bolívar de la era petrolera. A partir de este instante, los "consumistas" venezolanos del "Ta barato, dame dos" no tendrían igual y libre acceso a los petrodólares. Estos quedaban reservados solamente a la Oligarquía.
El proceso de implantación de los mecanismos administrativos de lo que sería el famoso Régimen de Cambios diferenciales (RECADI) coincide con el fin del período de LHC. Pero es precisamente con Jaime Lusinchi, quien asume la Presidencia inmediatamente después, que alcanza todo su "esplendor".
Quienes no estan familiarizados con la situación venezolana no se pueden imaginar jamás hasta donde puede llegar este mecanismo que en líneas generales significa controlar la emisión de divisas o moneda dura por parte del Banco Central el cual no posee autonomía operativa alguna y actúa por mandato del Gobierno Nacional. Este decide discrecionalmente quienes poseen el derecho a acceder a tan preciado néctar de "vampiros". En un país como Venezuela cuya renta petrolera es la única fuente de divisas, el Control de Cambio es la manera de apropiarse de la riqueza nacional y de lo que podríamos denominar "dinero propiamente dicho", como dijo en una oportunidad el humorista Pedro León Zapata.
EL CONTROL DE CAMBIO es un mecanismo para expropiar a la sociedad con el fin de mantener y beneficiar a un sector privilegiado y parasitario cuyos intereses están representados por el Estado. Ello se lleva a cabo por la vía del otorgamiento directo de los recursos financieros por un lado y del control del mercado de bienes y servicios por el otro. Como pueden ver, existe una diferencia notable entre esta definición y la que proviene del IESA.
Coloquemos un ejemplo con fines ilustrativos: las personas y organizaciones en general pagan en un mercado negro o paralelo 3000 bolívares por cada dólar americano; un valor superior al de mercado en un escenario de libre convertibilidad. Por su parte un grupo privilegiado y plutocrático solo paga 1900 Bs. por dólar, lo que resulta inferior al referido valor de mercado. El excedente desembolsado por el grueso de la sociedad por concepto del sobreprecio del dólar es entregado como subsidio a la "ÉLITE ECONÓMICA Y POLITICA" . Se produce ASÍ una transferencia de riqueza que resulta equivalente a implantar y recolectar un impuesto y distribuir su producto en metálico entre los miembros de la Oligarquía que sirve, entre otras cosas, para mantener al IESA y a sus economistas.
Existe otro aspecto, quizás mas limitante de la libre concurrencia económica que es la distribución discrecional del mercado de bienes y servicios. Asumamos que el mercado total de automóviles requiere 2 mil millones de US$ en importaciones de los componentes necesarios para su ensamblaje en el País. La firma que recibe 500 millones es favorecida con 25% del mercado. La llamada participación de mercado o "market share" es asignada por el Estado. Poco importa el esfuerzo de mercadeo realizado o la calidad de sus productos en relación a la competencia. La oferta total es por diseño inferior a la demanda total de tal manera que el consumidor se ve obligado a comprar lo que existe disponible en el mercado. Así, todos los que reciben divisas preferenciales logran vender sus modelos. Debido al desbalance entre la oferta y la demanda, el precio de venta en moneda local es calculado a la tasa paralela a partir del precio en USD del vehículo. La diferencia entre ambas tasas es transferida enteramente al fabricante. El consumidor no recibe beneficio alguno. Aún cuando se ha utilizado la industria automotriz como ejemplo representativo, el proceso descrito puede ser extrapolado a todas las áreas de negocios incluyendo al sector financiero particularmente privilegiado por el régimen actual de Hugo Chavez.
El caso de los laboratorios farmacéuticos es realmente asombroso y digno de una mención especial. Además de las divisas preferenciales y la sobrefacturación en los precios de importación, el Estado es el comprador directo a través del Instituto Nacional del Seguro Social (INSS), un verdadero coloso de la corrupción, la burocracia y la practica clientelar. Ni CAP, ni el breve suspiro neoliberal del "Chiripero" de Rafael Caldera lograron derribar este enclave de la "beneficencia publica". No se requiere mayor análisis para comprender los grandes dividendos que esta particular versión del libre mercado proporciona a las grandes empresas con el poder necesario y suficiente para influir las decisiones del gobierno. Nadie debe extrañarse tampoco que entre las firmas extranjeras se encuentran compañías obsoletas e incapaces de competir, reductos de la vieja economía, que han descubierto su nicho en lugares como Cuba, China, Venezuela, Rusia y algunos otros lugares del Planeta.
El Estado actúa como simple agente de factores empresariales e intereses creados. Estos "futuristas" intereses extranjeros constituyen connotados miembros de la Oligarquía e importantes patrocinantes del IESA. Por esta razón, esta institución es un modelo de la metodología educativa aplicada en el siglo XVI. Si, dieciséis!!! No olvidemos que en el siglo XIX la Dialéctica Hegeliana, precursora de la Marxista es elevada al rango de Filosofía Oficial del Estado Alemán y de enseñanza obligatoria en las universidades. En el siglo XVII, unos frailes de la Universidad de Salamanca impartían una teoría económica libertaria, anti Estado, considerada la génesis de la Escuela Austriaca. ?¿Dónde ubicamos al IESA? ?Es posible que algunos ciudadanos paguen por escuchar a unos farsantes decir que el Control de Cambio es simplemente expresión de los "errores" de unos burócratas del Gobierno?
Los mas atrevidos llegan al extremo de afirmar que se trata de intervención o apropiación de recursos por parte del Estado!!! Cuando se les pregunta ¿para qué?.. responden: "para sus propios fines".. pregunta de nuevo: ¿Cuáles fines?.. respuesta: "la burocracia, la revolución, etc". No hay duda de que nos encontramos ante un grupo de lacayos mercenarios. La alta carga impositiva y confiscatoria, directa o indirecta que existe en Venezuela, NO ES para cubrir gastos del Estado como educación, salud y seguro de desempleo como sucede en algunos países de elevado "gasto social". Es para ser depositada en las arcas de la élite económica. En Venezuela existen en teoría, por razones históricas, educación y salud gratuitas a cargo del Estado, pero en la práctica, las instituciones responsables se encuentran colapsadas y saqueadas por el mencionado aparato clientelar. De hecho, los escasos recursos aportados para tales fines son en realidad para alimentar a la misma casta de políticos atrincherados en los partidos y por supuesto a tantos economistas brillantes cuyo talento parece eclipsado por su falta de carisma. Es solamente por esta falta de carisma de los "economistas", que los venezolanos no se han enterado todavía de la esencia del CONTROL DE CAMBIO, a pesar de haber sentido su yugo por más de 20 años.
El problema de fondo, como era de suponer, es el de la subsistencia; estos académicos o profesores del IESA no han encontrado una manera mas digna de ganarse la vida.

Manuel Varela
mvcortizo@yahoo.com